La resurrección del mal
2016
Duración 80 min.
País Estados Unidos
Director Andrew C. Erin
Reparto Julie Benz, Fionnula Flanagan, Belle Shouse, Josh Stamberg, Danielle Harris,Dendrie Taylor, Toby Huss, Douglas Tait, Matt Lasky, Jennifer Blanc, Brian Howe,Currie Graham, Deep Rai
Bienvenido a Havenhurst, un complejo de apartamentos de estilo gótico en el corazón del distrito histórico Tudor de la ciudad de Nueva York. Un edificio antiguo muy bien mantenido, que alberga a más de 3.000 residentes... y muchos oscuros secretos. El precio del alquiler es lo que el inquilino pueda pagar y las reglas son simples: vivir una vida buena y decente y entonces podrá quedarse para siempre. Pero si se rompen las reglas...
JACKIE (Julie Benz), una joven mujer con problemas de adicción al alcohol, es dada de alta de rehabilitación y tiene una segunda oportunidad: un trabajo nuevo y un apartamento amueblado en Havenhurst. Atormentada por la culpa por la trágica pérdida de su hija de 8 años de edad, Jackie se involucra rápidamente en los misterios de Havenhurst, en particular en la desaparición de la inquilina anterior del apartamento, una mujer (Danielle Harris) que ella conoció y con quien entabló amistad durante su rehabilitación, y que recientemente desapareció sin dejar rastro.
Con la ayuda de un curtido detective de policía de Nueva York (Josh Stamberg) y una niña solitaria (Belle Shouse) que vive bajo la sombra de sádicos caprichos de sus cuidadores, Jackie no sólo debe combatir sus demonios internos... sino también los muy reales que viven tras los muros de Havenhurst.
Un hombre perfecto
2015
Duración 97 min.
País Francia
Director Yann Gozlan
Reparto Pierre Niney, Ana Girardot, Ludovic Berthillot, Valeria Cavalli, Marc Barbé, André Marcon, Laurent Grévill, Thibault Vinçon
Mathieu, de 25 años, siempre ha aspirado a convertirse en un autor reconocido. Un sueño que parece inalcanzable para él, porque a pesar de todos sus esfuerzos, sus obras nunca han sido editadas. Mientras tanto, se gana la vida trabajando en una empresa de mudanzas que dirige su tío. Su suerte cambia cuando se topa con el manuscrito de un viejo solitario que acaba de morir. Mathieu se apodera del texto y lo firma con su nombre con consecuencias imprevisibles.
Entrevista con Yann Gozlan
P: ¿Cómo nace la idea de la película?
R: Después de CAUTIVOS, mi primer largometraje, quería hacer un thriller; una película de género estilizada que cuenta la historia de un personaje dispuesto a pactar con el diablo para conseguir su sueño; hacer el retrato de un joven en busca de su identidad y que terminará perdiéndola. La identidad es un tema que me apasiona desde siempre, es universal y particularmente novelesca. ¿Cuál es el abismo que existe entre lo que eres y lo que aspiras a ser? ¿Qué estamos dispuestos a hacer para conseguirlo? ¿Cuál es el precio a pagar? Al robar el manuscrito de un muerto, Mathieu Vasseur, el protagonista, se enreda en una primera y gran mentira que le empujará por una espiral de la que ya no podrá salir. Puedes perderte en la mentira, puedes volverte loco. Me parecía que el tema era de plena actualidad: historias de plagios que se han multiplicado y proporcionado una fama fulgurante...
P: Mathieu - interpretado por Pierre Niney -, contrariamente a muchos impostores para los que lo único que cuenta es el éxito social, está literalmente invadido por el amor a la escritura.
R: No quería convertirlo en un Christophe Rocancourt. Mathieu no quiere triunfar tontamente, por casualidad. Tiene sinceramente la ambición de convertirse en novelista y está rabioso porque no lo consigue. Desde el principio teníamos que conseguir empatía por él para entenderle y no rechazarle luego cuando empieza a cometer actos censurables. Su problema es que le falta talento, aunque tiene, y mucho, para mentir.
P: A Mathieu, además le anima otra razón poderosa: Ali-ce, la mujer a la que ama, una intelectual procedente de una familia de la alta burguesía, se siente ante todo atraída por su talento de novelista.
R: Publicando el texto de otro, no sólo se convierte en lo que siempre había deseado, sino que además conquista a la mujer que ama y que le parecía inaccesible. Aunque pudiera soñar por un momento que le ama tal y como es, sin talento ni inspiración, su relación está basada en esa mentira inicial, en ese pecado original, y es una auténtica tortura psicológica para él. Alice termina por convertirse en el motor de cada uno de sus actos. Está dispuesto a todos los sacrificios para que ella mantenga intacta la imagen del hombre con el que cree vivir, hasta la última estratagema, que termina convirtiéndole en un fantasma. El mecanismo me apasionaba.
P: La película habla mucho de la agudeza del arte y de la creación. Mathieu, a fuerza de hacer alardes de imaginación para proteger su secreto termina encontrando la inspiración y escribe una auténtica novela.
R: Al principio es como una concha vacía. Cuanta más energía utiliza para salir de la intrincada situación que él mismo ha creado y que le ha atrapado, cuanto más reactivo es, más se alimenta su potencial creativo y surge la inspiración. No sabemos si ha adquirido el estilo, pero tiene cosas que contar. Me gusta mucho la idea de que haya un precio que pagar cuando uno se inicia en un proceso artístico. Y, sin embargo, aunque aborde este tipo de cuestiones, no constituyen el tema central de la película. No tengo ningún mensaje que trasmitir sobre la creación. Mi primer objetivo era desarrollar un suspense lo más acuciante y sofocante posible. Que nos sumergiera literalmente en la piel del personaje.
P: Al descubrir UN HOMBRE PERFECTO, es imposible no hablar de A PLENO SOL, de René Clément, y del "El talento de Mr. Ripley", de Patricia Highsmith, que es la novela que adapta en la pantalla.
R: Evidentemente, la película hace referencia a ambas obras. A PLENO SOL, en mi opinión, forma parte de las grandes obras maestras de la historia del cine. Y siento debilidad por Patricia Highsmith. Posee un increíble conocimiento científico del relato y de la mecánica del suspense consiguiendo dibujar, al mismo tiempo, personajes de una extraordinaria complejidad.
P: En Mathieu también encontramos, esa figura de desclasado o de fuera de sitio de Tom Ripley. Le construye como un proletario propulsado, como un cohete en un ambiente social que no es el suyo...
R: Me interesaba mucho ese toque suyo "working class". ¡No podemos fingir que las clases sociales no existen! Quería verle llegar vestido de mozo de mudanzas al aula en donde ve a Alice por primera vez. Es hermosa, habla de literatura, representa todo lo que él querría tener. Cuando era más joven, me acuerdo de algunos realizadores que venían a pedirme DVDs cuando trabajaba como vendedor en la Fnac, soñando con montar mis primeros cortos. Venían todo simpáticos, pero era muy violento para mí. Me hubiera gustado estar de su lado, pero estaba ahí, detrás del mostrador, con mi chaleco de la Fnac. Es duro tener una pasión y tener la sensación de estar en un callejón sin salida. Me identifico mucho con esta escena. Tenía otra razón para que Mathieu trabajara haciendo mudanzas de manera ocasional: las situaciones a las que se enfrenta en la segunda parte de la película exigían que estuviera en muy buena forma física; que tuviera un aspecto un poco atlético.
P: El contraste entre el ambiente del que procede Mathieu y el nuevo al que le hace acceder su nuevo estatus social es aún mayor, teniendo en cuenta que no tiene familia...
R: Es un auténtico lobo solitario. La dimensión social está ahí, a pesar de la buena voluntad que le muestra la familia de Alice. Haga lo que haga, no encuentra su lugar. Pero el abismo es aún más violento porque es un impostor, cautivo en su espiral de mentiras primero y, muy pronto, de crímenes. Mathieu está siempre detrás del cristal, como en esa escena en la que está observando a la familia de Alice, despreocupada y feliz en pleno cóctel; está casi desconectado de la realidad.
P: Estamos en un encierro permanente, tanto físico como mental.
R: Quería que estuviéramos identificados con él todo el tiempo, crear una especie de experiencia de inmersión. Pasamos con él de la prisión de las torres, sin horizonte, a la jaula dorada de la casona, sin dejar nunca esa angustia sorda que le atenaza y arrastra progresivamente a la película a una dimensión de extrañeza y estupefacción. Aparte de una escena corta en la que abandonamos su punto de vista para crear una especie de montaje paralelo, la puesta en escena tenía que estar al servicio de la subjetividad del personaje. De ahí los travellings en donde la cámara sigue a Mathieu de espaldas, mostrándonos lo que ve. Quería que la película hiciera sentir al espectador el estrés y la paranoia del protagonista.
P: Algunas escenas caen casi en lo fantástico, como cuando Mathieu sangra por la nariz en la mesa o sueña con una situación que, efectivamente, se producirá más tarde.
R: Me parecía que eran escenas de suma importancia, la subjetividad llevada a la exaltación. Penetramos en la mente del personaje, en su psicosis. Ese momento, para mí, es puro cine.
P: ¿Hay alguna razón particular para que el protagonista robe un manuscrito cuya historia se desarrolla durante la guerra de Argelia?
R: Sí, porque es una parte de la historia de Francia que sigue siendo tabú. Que el auténtico autor del texto haya participado y, peor aún, que haya muerto, agrava aún más el delito cometido por Mathieu. Aporta una dimensión casi faustiana a su gesto. Quema la novela y destruye la foto de este hombre: es como, si en cierto sentido, se condenara.
P: La condena está ya casi escrita en el momento en el que entra en la casa de los padres de Alice: el padre - André Marcon - le enseña su colección de pistolas antiguas y, cuando trabaja, Mathieu se sumerge en la contemplación de la escena del duelo del cuadro que preside su despacho...
R: Las pistolas y el cuadro, que representa la escena del duelo de Alexandre Pouchkine con un joven oficial francés, hacen que planee una amenaza sobre el decorado refinado y glamuroso de la casona. Son elementos que anuncian el drama que va a producirse: la violencia, la muerte y la caída al vacío.
P: La casa es casi un personaje más.
R: ¡Es un personaje más! Tenía que estar a nivel del mar, tenía que tener un halo glamuroso y majestuoso. Tardamos meses en descubrirla con el responsable de localizaciones, pero terminamos encontrándola en Hyères.
P: Háblenos de por qué eligió a Pierre Niney, realmente asombroso, en el papel de Mathieu Vasseur...
R: Pierre es mucho más que un actor. Tiene la pasta de un auténtico director. Siente las cosas, no las intelectualiza. Ha aportado muchísimo a la película, en términos de ideas y de preparación. Es todo un currante. Cogió músculo y llegaba al rodaje físicamente afilado como un gato. Me encanta su aspecto juvenil, que contribuye a la empatía que sentimos por su personaje: un niño atrapado en una trampa que le supera; y me encanta ese aire casi felino que desprende.
P: Frente a él, Ana Girardot y Thibault Vinçon están formidables en la ambigüedad...
R: El secreto está en las miradas. Para el personaje de Ali-ce, quería una actriz que fuera lo suficientemente joven como para dejarse manipular por Mathieu - una mujer de más edad, seguramente, lo habría desenmascarado más fácilmente. Thibault Vinçon, que interpreta a Stanislas, el amigo de la familia, también perteneciente a la alta burguesía, aportaba una dimensión que me gustaba especialmente: nunca sabes dónde ubicarlo. Es como una amenaza desconcertante. Sabes que es inteligente, y que es potencialmente peligroso. Siento debilidad por la escena en la que rememora con Pierre/Mathieu sus recuerdos de Argelia al borde de la piscina.
P: El guión, paradójicamente, apuesta por la elipsis. No es algo muy habitual en el cine francés.
R: La historia tenía que avanzar. Cuando encontramos a Mathieu, tres años después de su éxito literario del que podemos deducir que ha disfrutado muy poco tiempo, está entre la espada y la pared, su director le acosa, está angustiado. A Guillaume Lemans, el coguionista, y a mí nos preocupaba realmente la eficacia narrativa. Cuando estás escribiendo un thriller psicológico, la mecánica tiene que ira ajustada al milímetro. Pocos meses antes del rodaje, volvimos a trabajar los diálogos con Grégoire Vigneron. Y dio sus frutos: en el montaje, aunque tuve que cortar algunas escenas por cuestiones de ritmo, no tuve que quitar ninguna.
P: Háblenos de la puesta en escena, elegante, muy solar.
R: Aunque me encanta el efecto cámara al hombro, quería una puesta en escena posada y encuadrada. Además, había que crear un contraste entre el infierno que vive el personaje, la tensión que le mueve, y el esplendor de lo que le rodea. El físico de Pierre Niney contribuye también a dar ese toque luminoso. Formalmente, fantaseaba con una película que aliara la luz solar y el glamour de LA PISCINA, de Jacques Deray, y el rodaje riguroso, con tiralíneas, del CUCHILLO EN EL AGUA, de Roman Polanski. El cine de Claude Chabrol también me ha inspirado mucho EL CARNICERO es una de mis películas preferidas), y Hitchcock, evidentemente, el maestro absoluto del suspense. Cómo no pensar en él cuando vas a escribir un thriller. Pero eso son referencias imponentes, abrumadoras...
P: ¿Qué tipo de realizador es usted?
R: Hay directores que prefieren dar rienda suelta a su inspiración en el plató, les admiro pero yo no sé hacerlo. Creo que la improvisación sólo funciona si se ha trabajado mucho en la preparación. Trato de ensayar lo más posible antes del rodaje. Es una etapa fundamental, sobre todo cuando, como es mi caso, debutas en el cine. Los ensayos ofrecen la oportunidad de comprobar que las escenas y los diálogos funcionan. Para mí, esa es la fase en la que las cosas se concretan realmente. Una vez en el plató, la película está mucho más clara en mi cabeza. Antoine Roch, el Director de Fotografía, y yo nos habíamos puesto de acuerdo, desde el principio, sobre el reparto de tareas. Como yo quería que UN HOMBRE PERFECTO fuera una película estilizada, su papel era esencial. Le indiqué las referencias y, luego, le dejé total libertad para la luz. Junto con Jean-Philippe Moreaux, el escenógrafo, llevaron a cabo un trabajo formidable. Sin embargo, quería elegir el encuadre con él: los ángulos, dónde colocar la cámara, los objetivos y focales, ese es mi trabajo.
P: La música, obra de Cyrille Aufort, está muy presente...
R: Siento pasión por la música de las películas y, aunque esté de moda la música electrónica, tengo una inclinación especial por la música orquestal. La partitura de Cyrille Aufort trasmite, al mismo tiempo, una forma de lirismo y una extrañeza indispensable para la atmósfera de la película.
P: UN HOMBRE PERFECTO es muy distinto a CAUTIVOS, su primer largometraje, que coqueteaba más con el cine de terror.
R: CAUTIVOS es un ejercicio de estilo que reivindico al 200%. A pesar de los códigos tan marcados del género, ya abordaba el encierro físico y mental.
P: Le vemos como un director aparte de la nueva generación de cineastas franceses.
R: Mi recorrido es quizá un poco más complicado, es verdad, que el de los que salen directamente de la Fémis y se encuentran casi de manera natural en familia. Empecé estudiando economía en Dauphine - en aquella época, quería trabajar en el mundo de las finanzas - antes entrar en la escuela de cine de Saint-Denis, donde estuve sólo un año. En seguida, empecé a rodar vídeos institucionales para poder vivir y, luego, cortometrajes. Necesitaba tirarme a la piscina, aún a riesgo de tener a veces la sensación, como Mathieu, mi protagonista, de no estar exactamente en mi lugar. ¿Qué joven director no la tiene? ¡De todos modos, hay que tener mucho descaro para atreverse a dar órdenes a técnicos que tienen 2.000 películas a su espalda cuando no tienes más que dos en tu haber! ¿Eso puede hacer que me sienta diferente de los directores de mi edad? No creo, me siento cercano a su cine y trabajo mucho con antiguos alumnos de la Fémis.
P: ¿Háblenos de sus proyectos?
R: He retomado un guión que me interesa muchísimo - la adaptación de una novela que espero poder rodar en breve.
Entrevista a Pierre Niney
P: Es la primera vez que actúa en un thriller...
R: ... Y mira que es un género que me encanta. Cuando un thriller es bueno, cosa que no es habitual, me apasiona.
P: ¿Conocía a Yann Gozlan?
R: No había visto CAUTIVOS pero conocía sus dos cortos. Me acuerdo que me leí el guión en el avión que me llevaba al Festival de Cannes de hace dos años, pensaba leerme quince páginas y luego hacer otras cosas, pero no pude dejarlo. Cuando terminé de leer tenía la piel de gallina. En cuanto aterricé en Niza y encendí el móvil, le dije: en cuanto quieras. En Francia, cuando hacemos un thriller, solemos tener una cierta tendencia a explotar su lado más oscuro. En Yann Gozlan, realmente encontraba los códigos del ESCRITOR, de Roman Polanski, o de MATCH POINT, de Woody Allen; una calidad de escritura americana, asociada a la imagen francesa de A PLENO SOL, de René Clément o LA PISCINA, de Jacques Deray. Al terminar de leer el guión, me acuerdo de que también pensé en la película de Dominik Moll, HARRY, UN AMIGO QUE TE QUIERE BIEN: una historia que comienza de la manera más normal posible y que derrapa sin posibilidad de vuelta atrás.
P: ¿Qué le atraía de esta historia?
R: La problemática de la identidad y las cuestiones que plantea la película sobre el arte son muy inspiradoras para un actor. En el momento en que se ve atrapado en su propia mentira, Mathieu se hunde en un engranaje que le obliga a recorrer un camino iniciático en los meandros del mal y todo eso sirve de material para un sinfín de preguntas: ¿tenemos que enfrentarnos a pruebas tan difíciles para tener algo que contar? ¿Qué es lo que permite crear? Me gusta especialmente la idea de que este tipo, apasionado, no tenga talento. El cine suele interesarse más por personajes brillantes. Son pocos los directores que se inclinan por este tipo de figura, aparte de los "magníficos losers" de los hermanos Cohen, que me encantan. ¡En este caso, Mathieu tendrá que inventarse ese don, ese talento, porque se convierte en una cuestión de supervivencia para él!
P: ¿Sentía usted también ese tipo de angustia cuando interpretaba una escena?
R: Todos los actores tenemos momentos bajos de inspiración. Pero la llamada del público está ahí y solemos terminar encontrando una solución. A mi personaje le mueve la misma llamada de supervivencia: miente y llega hasta matar para solucionar - de manera muy temporal - los problemas que se le presentan.
P: ¿Qué placer le supone el hecho de interpretar a un usurpador de identidad cuando uno, por ser actor, juega todas las noches a cambiar de identidad en el escenario?
R: Es excitante. Cuando estaba preparando el personaje, no podía dejar de establecer la relación entre mi profesión y mi yo profundo. Mathieu disfruta haciéndose pasar por lo que no es, pero le supera. Yo tuve esa sensación cuando interpreté a Yves Saint Laurent: era como si ya no me perteneciera a mí mismo, era desestabilizador.
P: Para meterse en la piel de un autor de best seller, Mathieu procede un poco como un actor. Se sumerge, se impregna de la historia de Argelia, estudia las entrevistas a personalidades conocidas de la época...
R: Estoy convencido de que siente verdadera admiración por el autor del manuscrito robado: hay una forma de respeto en esta preparación a la que se somete. Estamos inmersos realmente en un juego de identidad.
P: Del que se suele salir perdiendo... Por ejemplo, no consigue encontrar su sitio en la familia de Alice...
R: Igual que el personaje interpretado por Rhys Meyer en MATCH POINT. O como la aspiración de un Martín Eden de integrarse en la burguesía. Es la eterna imposibilidad de una clase para fundirse con otra. Mathieu pretende integrarse pero, en el fondo, no puede. A mí me parece que es muy fuerte desde el punto de vista simbólico.
P: Como en el teatro, la película casi se desarrolla a puerta cerrada.
R: Pasamos un 80 % del tiempo en esa maravillosa casona y eso contribuye al sentimiento de angustia que desprende toda la película. Para mí, la casa es un personaje que interpretaría el papel de un testigo y de un aliado de los crímenes que comete Mathieu. Todo se construye en torno a este lugar aislado, de una belleza que quita el sentido. Hay algo de teatral que me gusta. El efecto de contraste entre la magnificencia del lugar y la violencia de lo que está sucediendo es muy fuerte.
P: Nunca ha negado su deseo de escribir, de dirigir y de producir. ¿Participó en la escritura del guión de la película?
R: El guión era perfecto, estaba hecho con tiralíneas. Yann sabía perfectamente lo que quería, no había mucho juego. Sólo le propuse que añadiera la escena en la que Mathieu pide cuentas al editor que ha rechazado su primer manuscrito: subraya hasta qué punto su personaje es un auténtico apasionado de la literatura y tiene una necesidad visceral de que le reconozcan. Hay un cierto toque naïf en la conversación que tiene Mathieu con su interlocutor: "Puedo cambiarlo todo", le dice. Es todo buena voluntad y está dispuesto a lo que sea para vivir de su arte...
P: ¿Volvió a ver alguna película para preparar el papel?
R: Volví a ver LA PISCINA de Jaques Deray, A PLENO SOL, de René Clément. Algunas películas de Polanski. También recurrí a INFILTRADOS, de Martin Scorsese, en la que hay todo un juego apasionante sobre la identidad.
P: ¿Cómo se enfrentó al personaje?
R: Pasando, como para casi todos, en el trabajo del cuerpo. Es un método que descubrí muy pronto, gracias a los artistas rusos. A los 18 años, tuve la suerte de actuar en una obra de teatro en Moscú - "Le Gars" de Marina Tsvetaïeva - un espectáculo montado mitad en francés y mitad en ruso. Los rusos, ya sean músicos o actores, utilizan una técnica muy física a la hora de abordar los papeles: lo hacen a través de sensaciones, del canto, de la danza. Es un enfoque menos intelectual que el nuestro y me parece muy complementario. Para la película, me entrené en un gimnasio, cogí músculo y perdí un poco de peso. Mathieu, mi personaje, tiene que hacer mucho esfuerzo físico, sobre todo en la segunda parte de la película. Tiene que tener mucha resistencia física.
P: ¿Su apariencia física le resultó algo evidente desde el primer momento?
R: Yann tenía una idea muy precisa de la manera en que Mathieu tenía que vestirse: con referencias muy marcadas al cine de los años 60. La camisa que llevo al borde de la piscina, y que bautizamos la camisa Delon, aporta, creo, un toque muy sensual a todas esas escenas. Esto casa con el deseo de dirigir una película que no sólo sea hermosa y moderna, a veces violenta, y sobre todo sensual y sexy. Por un momento, se me ocurrió dejarme barba. Cuando se publica "Arena negra", el libro robado, me parecía interesante que Mathieu tuviera ganas de esconderse. Yann me quería, al contrario, muy bien afeitado: la juventud de mi rostro tenía que contrastar con la violencia de los actos del personaje. Y tenía razón.
P: Consigue transmitir este contraste de manera increíble: en apariencia sereno, hirviendo por dentro.
R: Es el reto de la película. ¿Cómo dar color a las emociones de ese chico si estamos en un estado de tensión permanente? A veces me asustaba no poder mantener la distancia. Yann ha sido una fuente de inspiración directa. A veces, dicen que un tema se parece a su autor: lo he confirmado en este rodaje, le he robado muchas cosas.
P: En algunos momentos, el personaje tiene un aspecto casi animal.
R: Cuando eres un usurpador, te mueves por un territorio peligroso en el que te pueden desenmascarar en cualquier momento y te pones realmente en modo supervivencia. Duermes con un ojo abierto, como un animal, siempre listo para saltar, reaccionar. Yann me dirigía en ese sentido, en el nerviosismo. Había que poder sentir que, en la situación de peligro y de extrema incomodidad en la que se encuentra Mathieu, se es capaz de todo.
P: La película tiene a veces resonancias de Lynch: esa escena, por ejemplo, en la que el personaje ve cómo gotea sangre del techo durante una cena familiar...
R: ¡Me encanta esa escena! Se descuelga totalmente de la realidad, su mente está descarrilando. Esta escena y la de la pesadilla contribuyen a aumentar un poco la angustia que le tortura.
P: Decía que el guión estaba hecho con tiralíneas. Aún así, ¿hubo algún momento en que dio rienda suelta a la improvisación?
R: Al principio de la película, hay una escena en la que Mathieu acaba de recibir una respuesta negativa del editor. Sin tener que decírnoslo, Yann y yo notábamos que faltaba algo. En una de las tomas, seguí haciendo la escena después de la llamada y le pegué un golpe al cristal de la ventana del piso. Lo rompí. Me dio miedo de que esto supusiera algún problema para el resto del rodaje. Pero Yann enseguida gritó "¡me encanta!" El autocontrol y la automutilación son temas que pueblan los cortos de Yann, seguramente por eso también le gustó... decidió conservar la toma para la película.
P: Usted viene del teatro, en donde los ensayos tienen una función muy importante. ¿Qué tipo de actor de cine es usted?
R: Creo en el trabajo previo. Ensayar es algo que no tiene precio y siempre tiene su recompensa. Para esta película, bajo la supervisión de Yann, pudimos ensayar con Ana Girardot, que interpreta a Alice. Era muy importante que empezáramos a formar una pareja antes de llegar al plató. Eso no le quita espontaneidad alguna a las tomas, sino que permite explotar pistas, probar ideas. Luego, creo que cada película, cada obra, generan su propio método. Puedo llegar a pedirle al director que hagamos una toma más, pero la mayor parte del tiempo, si está satisfecho, yo no insisto. Mis amigos dicen que tengo el síndrome André Dussollier; como le pasa a él, cuando termina el día de rodaje, vuelvo a hacer la escena toda la noche, en mi habitación de hotel, rabioso quizá porque no hayan rodado la buena. Seguramente el deseo de ampliar mi carrera escribiendo, dirigiendo y montando me venga de esa insatisfacción permanente.
P: Trabaja en la Comédie Française desde 2010, empalma una película con otra y hace incursiones en televisión nada desdeñables, como "Casting(s)" de Canal Plus. ¿Cómo se pueden conciliar tantas actividades?
R: El ritmo de la Comédie Française es bastante intenso - he llegado a hacer "Fedra", por la tarde y "Un sombrero de paja de Italia", por la noche. Esa es la gran dificultad, la gran exigencia, pero también la gran suerte de esta casa: puedes trabajar con tu herramienta, como harías con un músculo o un instrumento musical, y replanteártelo todo de manera permanente. Sé que nunca dejaré el teatro, que para mí es la mejor escuela para un actor. Pero no me impide hacer otras cosas, no me prohíbo nada, no me pongo ningún límite, es solo una cuestión de planificación. Tengo mucha energía y una buena agenda.
P: Díganos cómo elige sus películas. ¿El éxito de YVES SAINT LAURENT ha influido?
R: No tengo una estrategia de carrera. Lo más importante es que me guste el guión. Una historia bien contada siempre es una historia mágica.
P: ¿Cómo gestiona uno el éxito a los 26 años?
R: Haría mal en quejarme, ¡he tenido tanta suerte!, entre otras cosas, la de criarme en el seno de una familia dotada de unos sólidos fundamentos: en ella el arte y su práctica son lo primero.
Locos dementes
2016
Duración 94 min.
País Estados Unidos
Director Jared HessGuión
Reparto Zach Galifianakis, Owen Wilson, Kristen Wiig, Jason Sudeikis, Devin Ratray, Ken Marino, Mary Elizabeth Ellis, Jon Daly, Kate McKinnon, Rhoda Griffis, Kevin J. O'Connor, Leslie Jones, Daniel Zacapa, Jill Jane Clements
Reparto Zach Galifianakis, Owen Wilson, Kristen Wiig, Jason Sudeikis, Devin Ratray, Ken Marino, Mary Elizabeth Ellis, Jon Daly, Kate McKinnon, Rhoda Griffis, Kevin J. O'Connor, Leslie Jones, Daniel Zacapa, Jill Jane Clements
Junto a un grupo de delincuentes con "pocas luces", liderado por Steve Chambers (Owen Wilson) y con un plan absurdo, David logra lo imposible y se hace con 17 millones de dólares en efectivo ... el único problema es que comete el error de entregar el dinero a esta panda de salvajes y es ahí cuando todo de complica. Estos delincuentes van gastando los millones en extravagantes y ridículos lujos y dejando un evidente rastro de pruebas. Ahora a la fuga, David debe esquivar a las autoridades, escapar de un hilarante sicario, Mike McKinney (Jason Sudeikis), y jugársela a los que habían sido sus socios y en los que él más confiaba.
Miss
2016
Duración 70 min.
País Argentina
Director Robert Bonomo
Reparto Robert L Makita, Malena Villa, Robert Bonomo
Robert tiene más de 30 años y vive obsesionado con la idea de batir algún récord mundial, el que sea. Entonces conoce a Laura; la sigue, la busca y entablan una extraña amistad, por lo que decide que quiere batir ese récord con ella.
El contador
2016
Duración 128 min.
País Estados Unidos
Director Gavin O'Connor
Reparto Ben Affleck, Anna Kendrick, J.K. Simmons, Jon Bernthal, John Lithgow, Jeffrey Tambor, Cynthia Addai-Robinson, Fernando Chien, Seth Lee, Michael Beasley,David Anthony Buglione, Jason MacDonald, Ron Prather, Alex Collins, Johnny Giacalone, Nick Arapoglou
Christian Wolff (Affleck) es un erudito de las matemáticas que siente mayor afinidad por los números que por las personas. Bajo la tapadera de una gestoría de un pequeño pueblo trabaja como contador autónomo para varias de las organizaciones delictivas más peligrosas del mundo. Con el Departamento Jurídico del Ministerio de Hacienda dirigido por Ray King (J.K. Simmons) pisándole los talones, se hace cargo de un cliente legal: una vanguardista sociedad de robótica en la que una secretaria de contabilidad (Anna Kendrick) ha descubierto una discrepancia por importe de millones de dólares. A medida que Christian va examinando los libros de contabilidad y aproximándose a la verdad, el número de muertos empieza a aumentar.
El oscarizado Ben Affleck (Argo, Batman v Superman: Dawn of Justice) interpreta el papel protagonista de The Accountant, del director Gavin O'Connor (Miracle, Cuestión de honor (Pride and Glory), Warrior).
En The Accountant también actúa la nominada al Oscar Anna Kendrick (Up in the Air, Into the Woods), el oscarizado J.K. Simmons (Whiplash, las películas de Spider-Man), Jon Bernthal (Corazones de acero, El lobo de Wall Street), Jean Smart (las televisivas Fargo y 24) y Cynthia Addai-Robinson (Star Trek: En la oscuridad), junto a Jeffrey Tambor (la televisiva Transparent y las películas de Qué pasó ayer?) y el dos veces nominado al Oscar John Lithgow (Interstellar, La fuerza del cariño, El mundo según Garp).
O'Connor ha dirigido la película a partir de un guión de Bill Dubuque (El juez). Mark Williams y Lynette Howel han sido los productores de la película, siendo O'Connor, Jamie Patricof y Marty Ewing sus productores ejecutivos.
El equipo creativo tras las cámaras incluye al director de fotografía dos veces nominado al Oscar Seamus McGarvey (Anna Karenina, Expiación, más allá de la pasión, Pan ), el diseñador de producción Keith Cunningham, el nominado al Oscar Richard Pearson (United 93 (Vuelo 93)), la diseñadora de vestuario Nancy Steiner, y el compositor nominado al Oscar, Mark Isham (Warrior, El río de la vida).
Trolls
2016
Duración 93 min.
País Estados Unidos
Director Mike Mitchell
Una comedia sobre la búsqueda de la felicidad y de lo lejos que llegan algunos para conseguirla. La película transporta a los espectadores al colorido y maravilloso mundo de los excesivamente optimistas Trolls, unos personajes que están siempre bailando y cantando, y de los cómicamente pesimistas Bergens, que sólo son felices cuando tienen un Troll en el estómago. Cuando los Bergens invaden el Poblado Troll, Poppy (Anna Kendrick), la Troll más feliz jamás vista, y el extremadamente cauto y gruñón Branch (Justin Timberlake) inician un viaje apasionante para rescatar a sus amigos. Durante esta misión, llena de aventuras y contratiempos, deberán tratar de aguantarse el uno al otro el tiempo suficiente para lograr su objetivo.
De los creadores de Shrek llega la película de DreamWorks Animation Trolls. Utiliza la música para sostener la narrativa de la película; la banda sonora de la película está producida por Justin Timberlake, que trabaja también como productor ejecutivo de música, y cuenta con canciones del propio Justin Timberlake, Gwen Stefani, Anna Kendrick y Ariana Grande, así como varios clásicos de la época de los 60, 70 y 80 versionados por miembros del reparto.
TROLLS cuenta con un reparto estelar, que incluye a Anna Kendrick, Justin Timberlake, Christopher Mintz-Plasse, Russell Brand, Zooey Deschanel, Jeffrey Tambor, Christine Baranski, James Corden, Kunal Nayyar, Ron Funches, Icona Pop, Quvenzhané Wallis, John Cleese y Gwen Stefani.
La película también expone un mundo único inspirado en fibras, materiales de terciopelo, pelaje, purpurina y colores brillantes. Los espectadores se verán envueltos en este universo táctil y atractivo, que no se parece a ninguno visto antes en el cine. Los productores lo llaman una "inmersión peluda".
Y luego están también los peinados de colores brillantes, que tienen un tamaño que desafía a la gravedad. Se trata del sello de identidad y la mayor gloria de todos los Trolls.
Encuentra tu lugar feliz
Los más pequeños disfrutarán del mundo único de TROLLS, repleto de inolvidables personajes, música, humor, aventuras y color. Y a los mayores les hará reflexionar sobre el tema general de la película: la búsqueda de la felicidad.
En efecto, el mundo de abrazos, bailes y cantos de los Trolls es pura felicidad, que rezuma en cada fotograma de la película. TROLLS habla de la manera en la que nos tratamos los unos a los otros y, lo que es más importante, cómo nos tratamos a nosotros mismos. Su mensaje, cargado de emoción, es que la felicidad sale de dentro y puede ser una fuerza poderosa y contagiosa cuando se extiende.
Es una idea poderosa e importante, especialmente en el mundo actual, en el que la negatividad, el miedo y la desigualdad tienen tanto protagonismo. La historia de TROLLS sugiere que cada uno de nosotros puede traer cambios a través de acciones y pensamientos positivos, a la vez que hace hincapié en la importancia de hacer lo correcto, incluso —o especialmente— cuando nos enfrentemos a grandes desafíos.
La felicidad era la prioridad del director de TROLLS, Mike Mitchell, y el codirector Walt Dohrn, incluso durante las primeras fases de las discusiones sobre la historia con los guionistas/coproductores Jonathan Aibel y Glenn Berger y la productora Gina Shay.
Los dos cineastas trabajaron juntos en la exitosa franquicia de DreamWorks Animation Shrek, por lo que los conocimientos que tenían sobre los queridos ogros y su mundo se trasladaron a sus primos lejanos, los Trolls.
La investigación que llevaron a cabo sobre la tradición troll, que tiene origen en la mitología escandinava, reveló que los trolls eran de un sinfín de formas y tamaños, desde gigantescos monstruos a diminutas criaturas que concedían deseos. Igual que hizo DreamWorks con Shrek, Mitchell y Dohrn decidieron adaptar la mitología de los trolls para crear un nuevo universo y nuevos personajes.
Los productores apuntan que adoptaron un aspecto de una historia anterior sobre trolls. "Nos encanta cómo, en origen, estas criaturas eran feas y aterradoras y evolucionaron con el tiempo para convertirse en criaturas feas pero adorables", explica Mitchell. "En los años 70 se convirtieron en un símbolo de la felicidad".
Dohrn añade: "Su sencillez y sus imperfecciones resultaban familiares y hacían que la gente se sintiera bien".
A medida que continuaron con su investigación sobre el mundo troll, Mitchell y Dohrn se centraron en el tema de la felicidad y el optimismo, y las ideas empezaron a surgir.
"Esas ideas nos convencieron, al igual que la oportunidad de crear una historia y una mitología desde cero", explica Dohrn. "Decidimos que era el momento de empezar a difundir de nuevo un poco de alegría. Mike y yo teníamos un papel en blanco, desde el que podíamos crear cualquier cosa con los personajes, la historia y los entornos. Con la felicidad como referencia, queríamos crear una película con una mezcla de diversión, aventuras, corazón, música, color y texturas".
Según la productora, Gina Shay, otra antigua alumna de Shrek de Mitchell y Dohrn, en muchos aspectos, TROLLS recuerda a la década de los 70, una época "en la que existía ese sentimiento de libertad; la música disco, pop y dance estaban por todos lados; y todo el mundo parecía ser patinador. Queríamos que los Trolls reflejaran esa felicidad en su sociedad. Además, son muy pacíficos".
Los Trolls tienen incluso un reloj especial que les recuerda que tienen que abrazar a cada hora en punto. Da igual lo que estén haciendo; cuando toca el reloj, es la hora de los abrazos. Mitchell apunta: "Una parte de ser feliz es conectar con otros, y qué mejor manera de mostrarlo que con un abrazo".
"Por otro lado, los vecinos de los Trolls, los Bergens, no son ni coloridos ni pacíficos", señala Shay. "Así que los Trolls deben intentar aplicar ese sentimiento de los 70 a los Bergens y enseñarles que la felicidad sale de dentro y que la puedes encontrar de muchas maneras diferentes". Y no es una tarea fácil, porque los Bergens carecen de armonía y alegría y sólo pueden encontrar la felicidad a través de medios visibles más dañinos. No tienen mucho control sobre su felicidad y es menos satisfactoria cuando la consiguen.
Comienza la aventura
Con el tema de la felicidad en su lugar, Mitchell y Dohrn empezaron a esbozar la historia. Consiguieron contar con la ayuda del equipo de guionistas Jonathan Aibel y Glenn Berger, que ya fueron los arquitectos de otro universo de cine de animación: las tres exitosas películas de DreamWorks Animation de Kung Fu Panda. Para Berger, este nuevo encargo fue "un verdadero cambio de ritmo y mucha diversión". Aibel añade que "el mayor regalo para nosotros como escritores en TROLLS es su misma premisa. Empezamos a trabajar con el personaje más optimista y el más pesimista del mundo y los lanzamos a este viaje".
TROLLS comienza, como no podía ser de otra manera, con una nota alegre, describiendo cómo viven los Trolls para cantar, bailar y abrazar; bailar, abrazar y cantar... en fin, se entiende la idea.
Después de una historia de fondo repleta de acción en la que vemos el heroico rescate del Rey Peppy (Jeffrey Tambor) de su pueblo, que había sido capturado por los Bergens, y el establecimiento del nuevo hogar de los Trolls en el bosque, conocemos a la hija de Peppy, Poppy, que comanda una celebración porque... ¡les encantan las celebraciones!
Desafortunadamente, la juerga ininterrumpida de Poppy y los Trolls atrae la atención de los Bergens, y el periodo de libertad de veinte años que han disfrutado llega a su fin cuando la maquinadora Bergen Chef (Christine Baranski) secuestra a los amigos de Poppy y se los lleva a Ciudad Bergen.
Sin nadie que pueda ayudarle, Poppy pide ayuda al único Troll que sabe cómo encontrar Ciudad Bergen, el siempre preparado, excesivamente cauto e infeliz Branch (Justin Timberlake). Branch es el único Troll que no canta ni baila y nunca jamás da abrazos.
Para rescatar a los amigos de Poppy de un destino fatal, Branch y Poppy deberán viajar al peligroso mundo de los Bergens. Por el camino, Poppy y Branch se encuentran con los obstáculos más impensables. En un momento crítico, el poder del pensamiento positivo parece fallarle a Poppy, que se desespera y pierde la voluntad. La negatividad, como la felicidad, es contagiosa, así que cuando Poppy flaquea, también lo hacen sus amigos. Y la responsabilidad de devolver la felicidad a los Trolls recae sobre el miembro más insospechado.
Poppy y Branch: Cuando los opuestos chocan
Cuando conocemos a Poppy, es una Troll siempre optimista, que encuentra la inspiración dentro de sí misma. Es la máxima suministradora de positividad. Más aún, es una chica con facultades, capaz y segura de sí misma, fuerte y resolutiva, colaboradora e integradora.
"Poppy es lo contrario a cualquier princesa que hayamos visto antes", afirma Mitchell. "Además de su capacidad de liderazgo, tiene una ventaja poco convencional, que queda patente con la ayuda inestimable de Anna Kendrick. Shay añade: "Anna es un poco escéptica, así que fue maravilloso que tuviera que aportar esa dignidad, esa profundidad y esas capas a Poppy".
Las cualidades únicas de Poppy también incluyen su apariencia, con la que Shay se siente identificada. "Como cineastas, creo que es nuestra responsabilidad crear personajes memorables que no hagan que las chicas se sientan mal con su propio cuerpo. Rompimos todas las reglas de las princesas con este personaje, ya que hicimos a los Trolls redondos y sin zapatos.
Mi hija tiene once años. Tiene una mentalidad muy fuerte y prefiero que la utilice para ser creativa antes que para obsesionarse con el espejo. ¡Porque todas las chicas son hermosas!", comenta Shay.
Kendrick agradece la dureza, la insolencia, la actitud positiva, la lealtad y, sobre todo, la capacidad de liderazgo de Poppy. Pero cuando conoció a Mitchell y Dohrn para hablar del papel, la actriz confiesa que tuvo algunas preocupaciones. "No sentía que fuera la persona adecuada para hacer el papel de la Troll más feliz; la dulzura no es mi fuerte. Advertí a Mike, Walt y Gina que podía llevar a Poppy por un camino más aguerrido. Creo que ese fue el término que utilicé.
Cuando los directores le garantizaron a Kendrick que su visión de Poppy era la misma que la suya, ella aceptó su Troll interior con mucha determinación. "Cada vez que entraba en la cabina de grabación y encontraba la cara sonriente de Poppy, me entraban ganas de añadir un poco de fuego, sarcasmo, insolencia y determinación al personaje", recuerda Kendrick. "Eso es lo que marca la diferencia entre un personaje incesantemente feliz y un poco irritante y uno que realmente cobra vida.
Dicho esto, confieso que, generalmente, arruinaba los primeros cinco minutos de cada sesión de grabación poniendo mi 'voz adorable'. No podría evitarlo; ¡Poppy es muy mona! Pero Mike y Walt me animaron a conseguir que esta pequeña criatura rosa pareciera real y compleja. Puede que Poppy no se parezca a Shrek, pero es igual de compleja.
Después de ver algunas de las primeras secuencias, Kendrick descubrió aún más aspectos inesperados del personaje gracias al "gran equipo de animación de DreamWorks, que consigue capturar el personaje de Poppy en cada diminuta expresión.
"Cada vez que me pedían que hiciera otra sesión de grabación, me alegraban la semana. De alguna manera, me sentía identificada cuando me preguntaba a mí misma por qué un Troll rosa de 15 centímetros me recordaba a mí misma. Ver a Poppy y a los otros Trolls me llenaba de alegría".
El malhumorado compañero y complemento de Poppy, Branch, es el único Troll paranoico. Mucho tiempo después de la liberación de los Trolls, él era el único que seguía viendo a los Bergens como una amenaza, pero nadie le creía. Branch lleva una existencia descontenta y siempre está preparado para lo peor. Ha perdido su sentido de la alegría y está desconcertado por la excesiva positividad de los demás Trolls. Branch se pregunta a menudo si es el único Troll cuerdo que queda. A lo largo de la película, se le desafía a dejar atrás el pasado, aunque eso implique una temida explosión de cantos, bailes y abrazos.
Branch representa nuestros miedos y la manera en la que nos envuelven y nos impiden sacar nuestra alegría interior. Siempre alerta, se consume pensando en los potenciales peligros y se pasa la vida preparándose para lo peor, en vez de disfrutar del presente. Aunque algunas de sus preocupaciones tienen fundamento, ya que hay muchos peligros reales alrededor, Branch debe aprender que tiene que seguir viviendo su vida y no dejar que el miedo le domine.
"Branch no es una persona muy sociable", apunta Justin Timberlake, que pone la voz original al papel y es el productor ejecutivo de música de la película. "No baila, no canta ni abraza, lo que le convierten en cierto modo en un marginado —dicho por él— de la comunidad Troll.
Es un duro superviviente y un gran contraste con todos los demás Trolls", continúa Timberlake. "No conecta con nadie".
Como buen superviviente, Branch ve el peligro en todas partes y, por lo tanto, la necesidad de impermeabilizar su casa contra visitantes no deseados, ya sean Bergens o Trolls. Por ese motivo, ha construido un refugio de supervivencia subterráneo, del que presume por estar altamente camuflado, fuertemente fortificado y cien por cien a prueba de Bergens.
"Sí, Branch está obsesionado", afirma Timberlake, que adoptó algunas de las actitudes "poco Troll" de Branch. "Pensé que sería muy divertido interpretar el sarcasmo y el pesimismo de Branch, a pesar de que yo no suelo ser así, al menos hasta que me tome el café de por la mañana", continúa el actor.
Haciendo alusión a la parte reconocible del personaje, a pesar de —o quizás gracias a— su constante negatividad, Timberlake comenta de broma que "Branch va a ser la voz de todos los padres que vean TROLLS. Les va a encantar Branch y se van a preguntar por qué los Trolls son tan felices todo el tiempo".
Del mismo modo que Kendrick tenía cuidado con no pasarse con la perpetua felicidad de Poppy, Timberlake no quería hacer que Branch fuera demasiado gruñón. "Me preocupaba que fuera demasiado cascarrabias y que no gustara a algunos espectadores", explica. "Afortunadamente, Mike, Walt y yo encontramos un buen equilibrio en el comportamiento del personaje. Pero no queríamos perder de vista tampoco lo divertido que era que Branch y Poppy fueran polos opuestos".
Cuando Poppy y Branch forman un equipo para rescatar a sus amigos, las dos naturalezas extremas de los Trolls se acaban encontrando en el medio, con sorprendentes resultados. De manera paralela, Poppy tiene una segunda misión de rescate, una de una naturaleza más personal: cambiar la actitud de Branch.
Como muchas otras parejas del cine, Branch y Poppy demuestran que los opuestos no se atraen, al menos al principio. Eso hace que la progresión de su relación sea aún más divertida de ver. "A Poppy le encanta Branch porque a ella le encanta todo y todo el mundo. Y eso molesta a Branch aún más, lo que supone un bonus para Poppy", explica Kendrick. Timberlake apunta que la insistencia de Poppy en Branch es "un tipo de coqueteo", mientras que Dohrn lo relaciona con una de las parejas más famosas de la gran pantalla: "Esta dinámica nos ofreció un sentimiento cálido que ya experimentamos cuando contamos una historia sobre Shrek y Burro".
Aunque la conflictiva química entre Poppy y Branch saca sus naturalezas opuestas, en el transcurso de sus aventuras, empiezan, poco a poco, a influenciar y aprender el uno del otro. Después de todo, deben encontrar la manera de trabajar conjuntamente para salvar a los amigos de Poppy. La misión afecta a Poppy de una manera que jamás se hubiera imaginado. "Una de las claves con Poppy era encontrar la manera de hacer que alguien que está siempre feliz tuviera que hacer frente a tantos problemas, para que cuando los resolviera, volviera a experimentar la felicidad, pero esta vez, una felicidad ganada, en lugar de algo que ya tiene por defecto", explica el guionista Glenn Berger.
Los Bergens: Buscando la felicidad en los lugares equivocados
Los Bergens son el extremo opuesto de los Trolls. Estos deprimidos gigantes creen que el único camino viable hacia la felicidad es amenazar a los Trolls. "Los Bergens son malos, presuntuosos y malhumorados", señala Mitchell. "Menos mal que no tienen smartphones, porque si no, estarían todo el rato mirándolos. No se relacionan con nadie".
El líder de los Bergens, con voz original de Christopher Mintz-Plasse, es el Rey Gristle Junior, un hosco veinteañero que juró devolver la felicidad a Ciudad Bergen capturando a los cercanos, pero bien escondidos Trolls. Gristle Junior es el hijo del Rey Gristle, con voz original del legendario cómico John Cleese.
Berger confiesa que el joven monarca es su personaje favorito, y hace referencia a un momento específico de la película para explicarlo: "Gristle está comprando en una tienda de baberos y se está comportando como un rey consentido mientras insiste en que ningún babero le queda bien. Está buscando un 'babero para hombres'. Para mí, esa frase lo resume todo sobre el personaje".
El comportamiento de Gristle también se explica porque el joven "nunca ha experimentado la felicidad ni el amor", explica Mintz-Plasse, más conocido por su cómico papel de McLovin en la exitosa Supersalidos. El actor apunta que cuando habló por primera vez del personaje con los productores, vio una imagen de Gristle y pensó: "Ah, vale, es como una especie de gremlin. Yo ya estaba preparado para que Mike y Walt me pidieran que pusiera alguna voz rara. Pero me dijeron que no, que querían que fuera yo mismo".
Debido a su comportamiento hostil, no sorprende que Gristle no tenga suerte en el amor. Pero ese estado podría cambiar si la criada Bridget tuviera algo que decir al respecto. Con la voz original de Zooey Deschanel (New Girl, Elf), Bridget es la Bergen más dulce y bondadosa de toda Ciudad Bergen; de hecho, puede que sea la única Bergen bondadosa. Bridget es sensible, tiene una voz dulce y esconde que está enamorada del rey. "Es nuestra Cenicienta", afirma Mitchell.
El guionista Jonathan Aibel le tiene un cariño especial a Bridget, un personaje que considera "complicado de escribir, porque cuando la conocemos, ella no se comunica. Así que ver cómo crece y aprende a expresarse es, probablemente, mi parte favorita de la película, especialmente, cuando tiene la cita de sus sueños con el Rey Gristle".
A medida que avanza su gran noche con Gristle, Bridget recibe la ayuda de Poppy y sus amigos, que no sólo le proporcionan trenzas de colores hechas de sus propios cabellos, sino que ayudan a poner palabras en la boca de la tímida Bridget para que mantenga una conversación con Gristle. "Esa escena de 'Cyrano' fue la más divertida de todas las que escribimos para la película", afirma Aibel.
Un Bergen con intenciones realmente malvadas es Chef (Christine Baranski, que debuta en una película de animación). En su época, esta Bergen tenía un codiciado puesto en la cocina real de Ciudad Bergen, hasta que sus malvados planes se frustraron hace veinte años. Ahora, Chef ha descubierto el escondite de los Trolls y está deseando volver a ponerles las manos encima.
Baranski, que ha interpretado a una gran variedad de personajes inolvidables, entre los que se incluye la importante fiscal de la aclamada serie The Good Wife, impregna a Chef con un magistral equilibrio de amenaza y diversión. Y no tiene mayor fan que Kendrick, que trabajó con la versátil actriz en la película musical Into the Woods. "Chef es gruñona, algo cruel y está hambrienta de poder; características que Christine interpreta de maravilla, y que son todo lo contrario a lo que es en realidad", afirma Kendrick. "Es muy divertido ver lo que ha sido capaz de hacer con Chef".
Finalmente, está Bibbly Bibbington (Rhys Darby), el propietario de la principal tienda de baberos de Ciudad Bergen. Y no es una empresa fácil, especialmente cuando tiene que servir las exigencias del rey.
El líder de los Bergens, con voz original de Christopher Mintz-Plasse, es el Rey Gristle Junior, un hosco veinteañero que juró devolver la felicidad a Ciudad Bergen capturando a los cercanos, pero bien escondidos Trolls. Gristle Junior es el hijo del Rey Gristle, con voz original del legendario cómico John Cleese.
Berger confiesa que el joven monarca es su personaje favorito, y hace referencia a un momento específico de la película para explicarlo: "Gristle está comprando en una tienda de baberos y se está comportando como un rey consentido mientras insiste en que ningún babero le queda bien. Está buscando un 'babero para hombres'. Para mí, esa frase lo resume todo sobre el personaje".
El comportamiento de Gristle también se explica porque el joven "nunca ha experimentado la felicidad ni el amor", explica Mintz-Plasse, más conocido por su cómico papel de McLovin en la exitosa Supersalidos. El actor apunta que cuando habló por primera vez del personaje con los productores, vio una imagen de Gristle y pensó: "Ah, vale, es como una especie de gremlin. Yo ya estaba preparado para que Mike y Walt me pidieran que pusiera alguna voz rara. Pero me dijeron que no, que querían que fuera yo mismo".
Debido a su comportamiento hostil, no sorprende que Gristle no tenga suerte en el amor. Pero ese estado podría cambiar si la criada Bridget tuviera algo que decir al respecto. Con la voz original de Zooey Deschanel (New Girl, Elf), Bridget es la Bergen más dulce y bondadosa de toda Ciudad Bergen; de hecho, puede que sea la única Bergen bondadosa. Bridget es sensible, tiene una voz dulce y esconde que está enamorada del rey. "Es nuestra Cenicienta", afirma Mitchell.
El guionista Jonathan Aibel le tiene un cariño especial a Bridget, un personaje que considera "complicado de escribir, porque cuando la conocemos, ella no se comunica. Así que ver cómo crece y aprende a expresarse es, probablemente, mi parte favorita de la película, especialmente, cuando tiene la cita de sus sueños con el Rey Gristle".
A medida que avanza su gran noche con Gristle, Bridget recibe la ayuda de Poppy y sus amigos, que no sólo le proporcionan trenzas de colores hechas de sus propios cabellos, sino que ayudan a poner palabras en la boca de la tímida Bridget para que mantenga una conversación con Gristle. "Esa escena de 'Cyrano' fue la más divertida de todas las que escribimos para la película", afirma Aibel.
Un Bergen con intenciones realmente malvadas es Chef (Christine Baranski, que debuta en una película de animación). En su época, esta Bergen tenía un codiciado puesto en la cocina real de Ciudad Bergen, hasta que sus malvados planes se frustraron hace veinte años. Ahora, Chef ha descubierto el escondite de los Trolls y está deseando volver a ponerles las manos encima.
Baranski, que ha interpretado a una gran variedad de personajes inolvidables, entre los que se incluye la importante fiscal de la aclamada serie The Good Wife, impregna a Chef con un magistral equilibrio de amenaza y diversión. Y no tiene mayor fan que Kendrick, que trabajó con la versátil actriz en la película musical Into the Woods. "Chef es gruñona, algo cruel y está hambrienta de poder; características que Christine interpreta de maravilla, y que son todo lo contrario a lo que es en realidad", afirma Kendrick. "Es muy divertido ver lo que ha sido capaz de hacer con Chef".
Finalmente, está Bibbly Bibbington (Rhys Darby), el propietario de la principal tienda de baberos de Ciudad Bergen. Y no es una empresa fácil, especialmente cuando tiene que servir las exigencias del rey.
Los amigos de Poppy
Poppy quiere a sus amigos de Poblado Troll, y haría cualquier cosa por rescatarlos de las garras de los Bergens. Su mejor amigo es Grandullón (James Corden), que tiene también el corazón más grande de todo el poblado. Debajo de ese cuerpo tan grande es, realidad, un trozo de pan y, aunque es un Troll de pocas palabras, Grandullón es como el capitán del grupo.
El mejor amigo de Grandullón es el Señor Dinkles, una oruga a la que le gusta actuar como un gato y al que le gusta vestir con sombreros. El polivalente James Corden, cuyas sesiones de karaoke en el coche para The Late Late Show se han convertido en una sensación en Internet, le ha aportado mucha diversión al papel. Según recuerda Berger: "Dijimos que teníamos que escribir más bromas para Grandullón porque James lo estaba bordando".
La DJ de Poblado Troll es DJ Suki (voz original de la superestrella de la música Gwen Stefani), con la que siempre se puede contar para pinchar música en momentos improvisados, de los que hay muchos en este mundo del canto y el baile. El equipo de DJ de Suki es completamente natural; está formado por grillos, escarabajos y otros insectos que, juntos, crean sonidos únicos.
Las voces originales de Satén y Chanelle, también conocidas como las gemelas fashion, están a cargo de Icona Pop, el dúo de música pop sueco formado por Caroline Hjelt y Aino Jawo, más conocido por la canción I Don't Care. Satén y Chanelle están muy, muy unidas; de hecho, están unidas por su brillante y colorido pelo. Las gemelas son fundamentales para complementar los trajes de Poppy.
Al igual que sus alter ego de la pantalla, el dúo de Icona Pop está muy unido. "Durante las sesiones de grabación, se comportaron como hermanas, incluso a veces terminaban las frases de la otra", asegura Dohrn.
Creek (voz original de Russell Brand), otro amigo de Poppy es el Troll más positivo, solidario y tranquilizador de todo el Poblado Troll. Pero resulta que Creek tiene un lado oscuro, que se manifiesta de manera peligrosa para sus amigos. Cuando conocemos al personaje, parece, según Brand "un Troll especialmente inteligente, quizás hasta de la próxima generación de la especie Troll. Está más allá del mundo material, incluso aunque el material sea de pelo y fieltro". Pero hay un momento crítico en el que Creek sufre un cambio de actitud un poco oscuro. "Se convierte en un traidor y un renegado", explica Brand.
"Nos atraía la idea de que alguien cercano a Poppy la engañara y le rompiera el corazón", resume Aibel. "Creek debía ser encantador y divertido y, a la vez, irritar a Branch con su positividad. Al mismo tiempo, queríamos que escondiera una naturaleza cínica y egoísta, que se revela cuando traiciona a Poppy. Russell Brand fue como un regalo para nosotros que supo aportar todo eso al personaje".
Luego tenemos a Guy Diamante (voz original del actor de Bing Bang Kunal Nayyar), el Troll reluciente que va desnudo. Debido a su preferencia por ir sin ropa, salvo por alguna purpurina colocada estratégicamente, Guy tiene mucha seguridad en su cuerpo y es una fiesta con patas.
Cooper (voz original de Ron Funches) es una rareza en el Poblado Troll: un peludo Troll con forma de jirafa que toca la armónica y tiene siempre una sonrisa tonta en la cara. "La principal característica de Cooper es su entusiasmo infinito", afirma Funches. El personaje tiene también una singular reacción cuando tiene miedo.
Dohrn se fue el encargado de grabar el personaje de Peque, una diminuta Troll con una sorprendente voz de barítono. Entre sus aficiones se incluyen: escuchar música heavy sueca y hacer ganchillo. El codirector también es la voz original de Nube, un habitante del bosque con forma de puff, al que le gustan los calcetines altos y chocar los cinco con cualquiera que se encuentre.
El resto del grupo lo completan Pelos, un Troll hecho casi entero de pelo (lo cual no es un tema de menor importancia, ya que las trenzas son una característica típica de los Trolls); y Harper, un Troll que utiliza su pelo como pincel, con el que crea piezas de arte detalladas y simbólicas.
El mundo único de Trolls
La tecnología que hay disponible actualmente para la realización de cine de animación es más sofisticada y realística que nunca. En muchos aspectos, la hierba o el agua, nunca habían parecido tan reales.
Pero los productores de TROLLS tenían en mente una idea bastante diferente para estas herramientas de efectos visuales de última generación. Decidieron crear un mundo como ningún otro jamás creado en el cine. "Queríamos transportar a los espectadores a un universo hecho a mano", explica Mitchell.
Para la estética de la película, la diseñadora de producción, Kendal Cronkhite-Shaindlin, se basó en texturas del arte con fibra, con materiales como el fieltro, terciopelo, macramé y materiales de flocado. Los productores lo llamaron una "inmersión peluda", un proceso que afirman que hará que los espectadores quieran meterse dentro de la película y tocar todos los personajes y escenarios.
El diseño, como todo lo demás en TROLLS, está hecho de alegría y felicidad. La mayor parte de la película, según Cronkhite-Shaindlin, es una "explosión de color que realza ese diseño. No importa la cantidad de obstáculos que se encuentre Poppy en el camino, el entorno suele ser divertido y muy colorido. La oscuridad y lo taciturno no es muy del mundo Troll", añade.
Cronkhite-Shaindlin se apoya en los años 60 y 70, la época en la que las versiones alegres de estas criaturas mitológicas se hicieron famosas. "En particular, se hace mucha referencia a la época de los 70", explica. "Los Trolls son algo hippies en la manera en la que viven en comunidad en la naturaleza. Y probablemente sean vegetarianos".
La tierra de origen de los Trolls, Poblado Troll, es un lugar mágico arraigado en su cultura. Se encuentra en un terrón dentro de un bosque, "de tamaño humano, así que es enorme para ellos", apunta Cronkhite-Shaindlin. "Queríamos que los Trolls fuesen como espíritus del bosque que están en contacto con su entorno, el cual es igual de peludo que ellos".
Hay varios momentos clave exentos de pelo y explosiones de color; en particular, las escenas en la que los Trolls pierden color, lo que significa que tienen miedo o han perdido la esperanza. Por otro lado, la obsesión de Branch con los Bergens le ha llevado a convertirse prácticamente en un Bergen, así que hay algo de oscuridad en su refugio de supervivencia.
La oscuridad es sólo uno de los diferentes modelos de diseño que ayudan a definir a los Bergens. Su mundo se inspira en una alfombra polvorienta y en el movimiento brutalista, que se hizo popular en los años 70, y que parecía apropiado para seres monstruosos. "Su sociedad es, de algún modo, parecida a la sociedad suburbana de los 70, así que los Bergens están hechos de poliéster, plástico, formica y otros materiales sintéticos", elabora Cronkhite-Shaindlin. "Comen comida rápida y no tienen ningún contacto con la naturaleza ni con nada bueno del mundo. La paleta de colores de los Bergens también es muy de los 70: naranjas y dorados oscuros y verde aguacate".
Para la fotografía general de la película, Mitchell y Dohrn también rinden homenaje a una de las figuras más destacadas del cine: Hayao Miyazaki, un director de cine, productor, guionista, animador, escritor y artista manga japonés entre cuyas películas se incluyen los aclamados clásicos de animación El viaje de Chihiro y La princesa Mononoke. "Muchas de las películas de Miyazaki son como sueños de hadas con extrañas y maravillosas criaturas", explica Mitchell. "Estas cosas tuvieron mucha influencia en TROLLS que, aunque pueda parecer una fiesta continua y sea muy irreverente, es también como un extraño sueño de hadas".
El pelo es la cuestión
El pelo es un aspecto característico de los Trolls y su universo. La responsabilidad de hacer que sus poderes casi sobrenaturales cobraran vida recayó en el "grupo de trabajo del pelo", compuesto por cientos de artistas y técnicos que trabajaron exclusivamente en efectos del pelo, garantizando que esta parte tan mágica tuviera siempre una apariencia —y una función— fabulosa.
TROLLS es la primera película de DreamWorks Animation que utiliza Willow, la herramienta de simulación de pelo largo exclusiva de la empresa. Willow es una herramienta única porque es eficiente y estable a la hora de resolver montones de problemas con los "días malos de pelo", como el encrespamiento, la fricción, elasticidad y los golpes de cientos de miles de pelos que hay en las cabezas de los personajes.
Permitió a los talentosos artistas de la producción diseñar, simular y ver una vista previa del pelo Troll con una sola aplicación, otorgándoles un control artístico interactivo que dio vida al pelo como a un personaje más. Antes de Willow, los artistas de los diferentes departamentos tenían que usar diferentes herramientas para conseguir el estilo, el desempeño y la apariencia del pelo.
Esa tecnología se utilizó al máximo de su capacidad, ya que los Trolls construyen todo a partir de pelo; se mueven con tirolesas hechas de pelo y hacen ejercicio en trampolines de macramé hechos de... sí, de pelo. Incluso el fuego y el agua parecen hechos de pelo. "Es un mundo tan logrado que ni siquiera cuestionas el hecho de que el fuego está hecho de pelo", apunta Timberlake. "¡El pelo es el superpoder de los Trolls!
El pelo de Troll es como un personaje más", añade Kendrick. "Los Trolls pueden esconder cosas entre el pelo, luchar con él e incluso usarlo de escalera. El potencial que tienen justo sobre sus cabezas es ilimitado. Hace que me pregunte por qué me cuido tanto el pelo si no hace nada comparado con eso. No me ayuda a pelear contra arañas gigantes".
Timberlake añade: "Branch usa su pelo como látigo... ¡a ver si Indiana Jones es capaz de hacer eso!"
Pero conseguir ese pelo de punta no fue sencillo: el grupo de trabajo del pelo creó un total de 1,8 millones de mechones: 84.000 para Poppy, casi 50.000 para Branch, y la corona de pelo es para Lady Purpurina Brillante (también conocida como Bridget), que utiliza 237.375 mechones, que lleva con la ayuda de Poppy y sus amigos, claro.
Todo lo que brilla…
¿Qué es una fiesta sin purpurina? Desde el principio, los productores tenían claro que querían usar purpurina como un efecto para aumentar la naturaleza alegre de los Trolls. Ya tenían previsto utilizar nubes y espráis de purpurina durante toda la película; e incluso como texturas en los personajes. "La purpurina es importante para un Troll", apunta Dohrn. "Es una parte importante de su mundo y, a veces, es la manera en la que expresan su felicidad".
TROLLS es la primera película que utiliza la purpurina hasta ese punto. Pero hasta que la película no estaba bien avanzada, no se logró purpurina de calidad. Hasta los ordenadores más avanzados tenían dificultades con la purpurina, la cual necesita moverse, revolotear y reflejar la luz en diferentes direcciones. Los productores descubrieron que los trozos de purpurina se veían muy bien cuando los Trolls estaban quietos, pero cuando se movían o bailaban (cosa que les encanta hacer), el efecto se derrumbaba.
"¿Quién iba a pensar que algo como la purpurina iba a ser tan complejo?", reflexiona Mitchell.
Una vez más, la innovación de última tecnología salvó el día... y el mundo de purpurina de los Trolls. El equipo técnico de DreamWorks desarrolló un ensombrecedor de purpurina, que permitía a los artistas controlar fácilmente el movimiento, la forma y el reflejo de los trozos de purpurina. Una nube de ruido de esferas en 3D le aporta a los trozos de purpurina una apariencia de distribución aleatoria natural, tal y como se ven en el mundo real. Los artistas podían subir o bajar la nube de ruido en 3D para que el movimiento de la purpurina pareciera aleatorio a la vez que les permitía dirigirlo.
Debido a que los Trolls, a veces, necesitan poner purpurina en su pelo, el increíble equipo del pelo de DreamWorks ajustó sus sistemas de pelo para tener también un espacio de referencia que permitiera que los trozos de purpurina centellearan con el pelo durante los bailes.
A los productores les gusta llamar a esa área que albergaba el ensombrecedor de purpurina el "laboratorio de purpurina", manejado por científicos que, según bromea Mitchell, "estudian la purpurina y no dejan de tirarla por ahí".
Por si crear nuevas herramientas para el pelo y la purpurina no fuese suficiente, los magos de la tecnología de DreamWorks desarrollaron un kit de herramientas de ajardinamiento digital para TIBER, lo cual facilitó una dirección artística interactiva en tiempo real y permitió a los diseñadores "plantar" el increíblemente detallado Poblado Troll.
De manera más específica, esta herramienta digital permitió una dirección de arte interactiva para las diferentes plantas, setas y casas que existen en Poblado Troll. Es un proceso que se vuelve sencillo... y maravilloso.
TROLLS también le da mucho amor digital al arte de los álbumes de recortes, ya que así es como los Trolls graban su historia. Cuando la película nos lleva al interior de la mente de Poppy, tiene la apariencia de un álbum de recortes, a través del cual podemos ver gran parte de su mundo. Otro equipo especial se centró en esa tarea crítica.
Todos cantan, todos bailan… Esto es Trolls
Otra dimensión importante y característica de TROLLS es la música. Una de las prioridades para los productores y el estudio fue garantizar que todas las canciones impulsaban la historia hacia adelante. "Las letras son parte de la narración", añade Dohrn. "Nunca queríamos que parara la historia sólo porque empezara una canción".
Mitchell y Dohrn esbozaron la historia y luego buscaron canciones que encajaran con el tono de cada momento o proporcionaran información sobre la personalidad de un personaje. Fue un proceso de "audición" de pasado y presente que incluye muchas décadas distintas y que abarca cientos, si no miles, de canciones.
Inicialmente, los productores pensaron usar sólo canciones clásicas para facilitar una experiencia compartida con los espectadores. Pero cuando Timberlake se unió al equipo como productor ejecutivo de música, la decisión sencilla era dejarle escribir o coescribir algunas canciones nuevas también.
Según Timberlake, este doble trabajo en TROLLS fue desbordante.
"Siempre he querido supervisar la banda sonora de una película", continúa el actor, "y pensé que qué mejor manera de dar el paso que con una película en la que actúe. Me siento más cercano a la historia habiendo interpretado a uno de sus personajes. Poner la voz a Branch me sirvió de mucha ayuda a la hora de escribir la música de TROLLS".
Contar con Timberlake para asumir esas responsabilidades fue el matrimonio perfecto entre artista y material. "Para Justin fue algo natural convertirse en compañero nuestro", apunta Shay para explicar la conexión instantánea que tuvo con el proyecto. "Cuando le enseñamos varias imágenes y escenas preliminares, Justin hizo clic: saltó de la silla y se podía sentir su entusiasmo. Llevó la música a niveles inesperados de sofisticación y también aportó tono; embelleció los sonidos desde el punto de vista de la producción e hizo que sonaran mucho mejor".
En su papel de productor ejecutivo de música, Timberlake trabajó estrechamente con los actores para pulir actuaciones musicales. "Justin no escatimó en esfuerzos a la hora de sacar lo máximo de nuestro formidable y polivalente reparto", afirma Mitchell. "Su pasión por la música fue una inspiración para todos nosotros". Mintz-Plasse añade que contar con Timberlake en la supervisión de sus propias canciones "fue lo más divertido del trabajo en TROLLS. Soy una gran seguidora de su carrera musical e interpretativa desde hace años. Entrar en la cabina de grabación y que Justin me dijera cómo cantar son momentos que no olvidaré en mucho tiempo".
Kendrick bromea que cuando trabajaba con Timberlake en su capacidad de producción musical, se sentía como si "estuviera en una de esas películas sobre músicos y Justin fuese la persona que presiona los botones en la cabina de control para decir: hazlo mejor".
TROLLS empieza con la canción Hair Up, interpretada por Timberlake, Gwen Stefani y Ron Funches. La canción, con música y letra de Timberlake, Max Martin, Shellback, Savan Kotecha y Oscar Holter, ayuda a establecer la historia de los holgazanes Bergens y, específicamente, del joven Rey Gristle Junior.
A continuación, vemos una breve historia de la civilización Troll con la canción September, con música y letra de Al McKay, Allee Willis y Maurice White, cantada por The Outfit; seguida de una alegre canción que cantan Poppy y algunos Trolls jóvenes en armonía.
Una compilación que incorpora Move Your Feet (escrita por Jesper Mortensen), D.A.N.C.E. (escrita por Gaspard Auge, Jessie Chaton y Xavier De Rosnay) y It's a Sunshine Day (escrita por Stephen McCarthy) e interpretadas por Funches, Anna Kendrick, James Corden, Icona Pop, Stefani, Kunal Nayyar y Walt Dohrn proporciona un alegre número de baile cuando los Trolls se dirigen a la celebración del cumpleaños del Rey Peppy.
Get Back Up Again es una canción original del equipo de Benj Pasek y Justin Paul, los escritores del musical Dear Evan Hansen. La canta Kendrick cuando Poppy se embarca en su viaje y encuentra algunos abrumadores desafíos por el camino. Puede que Poppy tenga algunas dudas sobre la misión de rescate, pero no puede dejar que afloren. Debe ser la optimista eterna, y la canción lo expresa de una manera divertida y alegre.
Branch accede, muy de mala gana a unir fuerzas con Poppy. Cuando los dos acampan para pasar la noche al calor de una hoguera, Poppy molesta a Branch con sus interpretaciones de Dream a Little Dream of Me (música de Fabian Andre y Wilbur Schwandt, letra de Gus Kahn) y The Sound of Silence (música y letra de Paul Simon), la cual adopta Kendrick como suya. "Puede que sea mi favorita", confiesa la actriz, haciendo referencia al querido clásico de Simon and Garfunkel, "ya que no sólo tengo la oportunidad de cantar esta canción tan maravillosa, sino que Poppy disfruta mucho viendo que Branch odia que cante".
Las cosas se vuelven un poco más oscuras con la canción de Gorillaz Clint Eastwood, interpretada por The Outfit. La letra y el tono sombrío e irónico de la canción ofrecen otra mirada a los Bergens y su triste vida.
Get Lucky, interpretada por Vitamin C Quartet, ve cómo el Rey Gristle engulle a Creek (o eso es lo que parece).
La balada de Lionel Richie Hello, cantada por Zooey Deschanel como Bridget, enfatiza el enamoramiento de la criada del Rey Gristle.
Los Trolls se reúnen brevemente con Poppy, lo cual, por su puesto, requiere una Celebration (con alguna letra nueva para el clásico de Kool and the Gang), seguida de Fakeover, cantada por Funches, Kendrick, Corden, Icona Pop, Stefani y Nayyar, en la que los Trolls convencen a Bridget a hacer un cambio de imagen.
En medio de la celebración, Branch tiene un flashback emocional y cuenta a los Trolls la trágica historia de la muerte de su abuela a ritmo de Total Eclipse of the Heart (inmortalizado por Bonnie Tyler e interpretado para la película por Liam Henry, Deschanel, Funches, Corden, Icona Pop y Nayyar).
Regresamos al cambio de imagen de Bridget cuando ella y sus nuevos amigos cantan una versión de I'm Coming Out (escrita por Nile Rodgers y Bernard Edwards, originalmente cantada por Diana Ross e interpretada para la película por Funches, Kendrick, Corden, Icona Pop, Stefani y Nayyar, con un solo de Deschanel) para preparar a Bridget para la gran cita con el rey. El cambio de imagen también incluye un seudónimo que adopta Bridget para su crucial cita: Lady Purpurina Brillante.
¡Es hora de la gran cita! Bridget y el Rey comparten una pizza y después salen a patinar mientras Ariana Grande canta They Don't Know, con música y letra de Max Martin, Justin Timberlake y Shellback.
Más tarde, Gristle intenta meterse de lleno en la cita cantando frenéticamente una versión del éxito de discoteca I Feel Love, popularizado por Donna Summer y cantado para la película por Christopher Mintz-Plasse como el joven rey. A continuación, el enamorado monarca espera en una ventana, esperando que llegue Lady Purpurina Brillante mientras Timberlake interpreta Hair Up.
Una nueva versión de True Colors (música y letra de Thomas Kelly y William Steinberg), interpretada por Kendrick y Timberlake acompaña una escena muy emotiva con Poppy, Branch y los amigos de Poppy, en la que la princesa pierde la esperanza y el color. "Es un momento increíble de la película", afirma Timberlake. "La canción tenía un significado específico cuando Cyndi Lauper la cantó en los años 80 y en nuestra película adquiere un nuevo significado. No hay ninguna canción que funcione tan bien en esta escena".
Ariana Grande reinterpreta el tema They Don't Know cuando Gristle y Bridget vuelven a encontrar el amor.
Can't Stop the Feeling, escrita por Timberlake, Martin y Shellback, es un himno festivo que vuelve a reunir a los Trolls y los Bergens. La canción está interpretada por Timberlake, Deschanel, Funches, Mintz-Plasse, Kendrick, Corden, Icona Pop, Stefani, Nayyar, y un coro. "Está llena de optimismo, que nos arrastra a su creación", apunta Timberlake. "Escribirla me hizo realmente feliz". El director, Mike Mitchell, añade que la canción "resume todo lo que queríamos transmitir con la película. Te llena de felicidad cuando la escuchas.
"Le dijimos a Justin que tenía que escribir una canción que transformara la visión del mundo de toda una comunidad. Y ésa no es una tarea sencilla, por cierto. Bueno, igual para Justin sí que lo es".
Cuando comienzan los créditos del final, podemos disfrutar de September, interpretada por Kendrick y Timberlake.
El versátil compositor de cine Christophe Beck, entre cuyos numerosos trabajos se incluyen Dando la nota, Frozen: El reino del hielo y Ant-Man, trabajó estrechamente con Timberlake para componer la banda sonora. "Christophe ha cogido las canciones que, aunque fueran de épocas diferentes parecía que seguían una línea, e interpoló algunas de ellas en su banda sonora", explica Shay. "Por ejemplo, Christophe cogió Hello y la usó como el tema de Bridget en toda la película".
Finales felices
Sí, ser feliz es bonito. La felicidad es buena. ¿Pero por qué se iba a hacer una película sobre ella? Mitchell vuelve a la idea de que "en el mundo actual ocurren muchas cosas lamentables, así que por qué no ir al cine a ver algo que parezca y se vea como una fiesta para pasar un rato agradable".
Dohrn añade una alegre perspectiva similar: "Es bonito hacer una película que irradie optimismo y, al mismo tiempo, formule preguntas importantes sobre la felicidad y su origen".
Para Shay, la película es diversión y sorpresas. "En TROLLS abunda el humor irreverente, que es completamente inesperado, así como el corazón", afirma. "También te invita a un mundo que no has visto antes".
Para sus dos actores principales, el tema de la alegría es la razón clave por la que se unieron al proyecto; y les proporcionó unos recuerdos inolvidables cuando terminaron de grabar. "TROLLS me hace sonreír y reír", asegura Timberlake. "Me encanta su humor real. La felicidad nos conecta y lo curioso es que el personaje que desempeño, Branch, intenta por todos los medios evitar la felicidad. Al final, por supuesto, no puede conseguirlo", concluye.
"Cuando veo la película, pienso que me gustaría que su universo fuera real", confiesa Kendrick. "Y que podría visitarlo".
La fiesta de las salchichas
2016
Duración 89 min.
País Estados Unidos
Director Conrad Vernon, Greg Tiernan
Una película de animación por ordenador para adultos, trata sobre una salchicha que dirige a un grupo de productos de supermercado en una búsqueda para descubrir la verdad sobre su existencia y lo que realmente sucede cuando los eligen para abandonar la tienda.
Con las voces de Michael Cera, James Franco, Salma Hayek, Jonah Hill, Danny McBride, Edward Norton, Seth Rogen, Paul Rudd y Kristen Wiig. Dirigida por Conrad Vernon y Greg Tiernan. Guion de Kyle Hunter, Ariel Shaffir, Seth Rogen y Evan Goldberg. Historia de Seth Rogen, Evan Goldberg y Jonah Hill. Producida por Megan Ellison, Seth Rogen, Evan Goldberg y Conrad Vernon. Jonah Hill, James Weaver, Ariel Shaffir, Kyle Hunter y David Distenfeld son productores ejecutivos. Pilar Flynn, Alexandria McAtee y Jillian Longnecker son coproductores. Bert Van Brande es el supervisor de efectos visuales. Kevin Pavlovic se ha encargado del montaje. La música es de Alan Menken y Christopher Lennertz. Gabe Hilfer es el supervisor musical.
Acerca de la película
Seth Rogen y Evan Goldberg son los cerebros responsables de algunas de las comedias más disparatadas, imaginativas y desternillantes del mundo, desde "Super cool" a "Superfumados", o "Este es el fin" y "The Interview". Ahora, se meten en el mundo de la animación para la producción de Columbia Pictures y Annapurna Pictures LA FIESTA DE LAS SALCHICHAS, la primera comedia de animación generada por ordenador para adultos del mundo, sobre un grupo de productos de supermercado que emprende una búsqueda para descubrir la verdad sobre su existencia y lo que realmente sucede cuando los eligen para abandonar la tienda.
"Hay una antigua tradición en el cine de animación, sobre todo en el generado por ordenador, sobre la vida secreta de las cosas que nos rodean", explica Goldberg. "Hemos visto coches, hemos visto juguetes... nos encantan todas esas películas. Y acabamos dándonos cuenta de que había una versión tremendamente divertida de ese tema con la vida secreta de la comida".
"Es una versión muy extraña del viaje del héroe", prosigue Rogen. "Más que ninguna otra de nuestras películas, permite utilizar esa estructura del marginado que siente la llamada para liberar a las masas de sus ataduras. Podíamos hacer una película con esas ideas increíblemente estructurales y, al mismo tiempo, suceden un montón de cosas complemente disparatadas".
La idea de la película surgió en 2008, como uno de los tres primeros proyectos de Point Grey. Tenían el proyecto que acabaría convirtiéndose en "Este es el fin", la comedia de éxito que recaudó más de 100 millones de dólares, el proyecto que acabaría convirtiéndose en"50/50", la comedia dramática alabada por la crítica, y en tercer lugar LA FIESTA DE LAS SALCHICHAS, la divertidísima película de animación sobre la picante vida de nuestra comida.
"El concepto del filme era: ‘¿Y si las salchichas pudieran vivir su sueño de meterse en un panecillo?’", aporta el productor ejecutivo Kyle Hunter, que coescribió el guion con Ariel Shaffir, Seth Rogen y Evan Goldberg.
"Trata sobre una salchicha, Frank, que está enamorada de un panecillo llamado Brenda", prosigue Shaffir. "Creen que los van a ‘elegir’ para abandonar juntos la tienda, y salir de la tienda es su versión de lo que creen que es el cielo. Pero entonces Frank oye por casualidad a un producto que ha estado realmente fuera de la tienda, y asegura que no es lo que todo el mundo cree, en realidad es terrible, más parecido a ir al infierno. Se caen del carro de la compra, en lugar de ser elegidos, y Frank emprende un viaje para descubrir la verdad de lo que realmente sucede".
Hunter dice que, aunque el propio argumento estaba cargado de chistes, también intentaron que el estilo, el tono, la estructura y la forma del guion transmitieran humor. "Nos fijamos en algunas de nuestra películas de animación favoritas y les dimos un giro verdaderamente subversivo", afirma. "Queríamos que tuviera el aspecto y el aire de las películas de animación que conocemos, pero con personajes que dijeran cosas horribles".
Hunter y Shaffir realizaron también su propia labor de documentación. "Fuimos a un supermercado, nos dimos una vuelta los dos juntos, comentando ‘¿Podríamos usar esto? ¡¿Y qué tal eso?!", recuerda Shaffir.
En un primer momento, Rogen contactó con Conrad Vernon para que dirigiera la película a finales de 2009. Vernon había dirigido recientemente el éxito de animación "Monstruos vs aliens", en el que Rogen había puesto voz a uno de los personajes principales. "Seth me llamó un día inesperadamente", recuerda. "Me hizo sentarme y me preguntó: ‘¿Qué te parecería hacer una película de animación para adultos?’. Y es algo que he querido hacer desde que tenía 13 años y vi el tráiler de la película ‘Heavy Metal’. Solamente he tenido que esperar 30 años para que me ofrecieran la oportunidad de hacerlo".
Vernon decidió fichar como codirector a Greg Tiernan, copropietario junto a su mujer y productora, Nicole Stinn, de Nitrogen Studios, el estudio de animación de Vancouver en el que se realizó LA FIESTA DE LAS SALCHICHAS. "Conrad y yo trabajamos juntos hace años en la cinta de Ralph Bakshi ‘Cool World (Una rubia entre dos mundos)’, que es una especie de pseudopelícula para adultos, aunque solo era para mayores de 13 años", explica Tiernan.
Tiernan, de origen irlandés, sostiene que el proyecto despertó su interés no solo porque era divertido, sino también porque era una oportunidad de trabajar en una cinta de animación para adultos, un género que tiene mucha más presencia en el resto del mundo que en Estados Unidos, donde la animación es un género considerado fundamentalmente familiar. "A los creadores de ‘South Park’ les ha ido evidentemente muy bien, pero nadie más lo ha hecho a gran escala, y no hay razón para ello. En Europa y Asia, hay una actitud mucho más despreocupada hacia la animación, y ya he trabajado antes en proyectos de animación para adultos, pero ninguno de ellos vio la luz del día en Norteamérica".
El equipo de Point Grey le planteó entonces el proyecto a Megan Ellison, de Annapurna Pictures, que se incorporó al mismo para hacerlo realidad, y Annapurna se asoció con Columbia Pictures como cofinanciador y distribuidor. "Aceptó proporcionarnos el presupuesto necesario para elaborar una prueba de concepto", aporta el productor ejecutivo James Weaver como detalle sobre los entresijos del proyecto.
"No realizamos presentación alguna del proyecto, ofrecimos directamente la película", comenta Goldberg. "Nos gastamos nuestro propio dinero, y Megan también aportó bastante dinero propio, antes de que hubiera un compromiso de distribución, porque todos creíamos mucho en el proyecto y estábamos deseando hacerlo. Pudimos venderlo una vez contamos con un guión, directores, estudio de animación y reparto".
Weaver asegura que, aunque la película es decididamente para mayores y brinda lo que los espectadores adultos buscan en una comedia, LA FIESTA DE LAS SALCHICHAS también es más que un único chiste. "Ofrece todo lo que los espectadores adoran de la animación: tiene verdadero corazón y personajes inolvidables", apunta. "Simplemente le añadimos un envoltorio superdivertido para adultos".
Acerca de los personajes
Como la película está ambientada en un supermercado, los actores principales interpretan a los típicos productos que se venden allí. Seth Rogen, Jonah Hill y Michael Cera hacen de salchichas (Frank, Carl y Barry, respectivamente); Kristen Wiig hace de Brenda, un panecillo; Salma Hayek hace de Teresa, un taco; Danny McBride hace de Mostaza Miel (salsa de mostaza con miel); Edward Norton hace de Sammy, un bagel (rosca de pan); David Krumholtz hace de Lavash (un pan plano de origen armenio); Bill Hader hace de Aguardiente; Craig Robinson hace de Gachas (sémola de maíz); Nick Kroll hace de Ducha Vaginal, James Franco y Paul Rudd interpretan a seres humanos: Franco hace de Drogata y Rudd de Darren, un dependiente de la tienda.
Frank encabeza la búsqueda de la comida. "Frank anda en busca de la verdad", explica Hunter. "Todas las demás salchichas de su paquete creen que lo que hay más allá de esas puertas es el cielo y él es el único que se cuestiona las cosas. Cuando se da cuenta de que algo huele a chamusquina, es cuando empieza su viaje".
Kristen Wiig interpreta a Brenda, el panecillo de los sueños de Frank. "El personaje de Brenda quedó definido en la primera sesión de grabación", recuerda Shaffir. "Teníamos una idea general, pero entonces Kristen empezó a improvisar un poco y a contar chistes malos. Y así fue como nos dimos cuenta: ‘Oh, Brenda es una bromista, que se cree más graciosa de lo que verdaderamente es’. Nos pusimos a reescribir el personaje a partir de lo que había hecho ella y adquirió un carácter completamente distinto. Fue genial".
El viaje de Frank se pone en marcha cuando Mostaza Miel descubre el pastel de lo que verdaderamente sucede fuera de la tienda. "Mostaza Miel es un personaje tipo veterano de guerra sureño", explica Weaver. "Danny McBride lo interpreta a la perfección".
Jonah Hill y Michael Cera se unen a la diversión como salchichas que acompañan a Frank en el mismo paquete. Hill interpreta a Carl, "un amigo de Frank que le brinda todo su apoyo, aunque acaba falleciendo", comenta Weaver.
Cera, por otro lado, es Barry: "Es el que sufre la mayor transformación", comenta Hunter."Empieza siendo sumiso, dejándose llevar, pero a lo largo del viaje descubre su propia fuerza interior. Es el que consigue salir de la tienda y descubrir la verdad de la peor forma imaginable".
Edward Norton pone voz a Sammy Bagel, Jr., tras haberse pedido el papel desde el principio y negarse a permitir que se lo ofrecieran a nadie más. "Edward fue una de las primeras personas a las que le hablamos del proyecto y perdió un poco la cabeza por él", aporta Goldberg. "Se obsesionó rápidamente".
Norton también hizo un poco de director de casting, según Rogen y Goldberg, ya que fue fundamental para conseguir fichar a Salma Hayek. "La verdad es que no la conocíamos, yo había estado una vez en una cena con ella", recuerda Goldberg. "Vino y se esforzó tanto como el que más. Estaba literalmente sudando en la cabina de tanto saltar. Es fácil entender por qué es una estrella con tanto éxito, lo da todo".
David Krumholtz interpreta a una especie de némesis de Sammy, Lavash. "David Krumholtz lleva ligado a este proyecto prácticamente desde el principio", aporta Hunter. "Dio forma a su personaje con nosotros durante unos seis o siete años tal vez, estaba en todas las mesas italianas que hicimos. Quería interpretar este papel, lo vivía. Y es seguramente la persona más graciosa que he visto en mi vida".
Bill Hader, que ha puesto voz a innumerables personajes de películas de animación, interpreta a Aguardiente. "Es todo un maestro en estas cosas", afirma Goldberg. "Es uno de los personajes más extraños que jamás he visto", opina Rogen, "y luego a los animadores se les ocurrieron todos esos gestos con las manos".
Nick Kroll acabaría grabando su papel de Ducha dos veces. "Nick interpretó originalmente el personaje con un acento de petimetre shakesperiano", recuerda Vernon, aunque esa dirección no acababa de funcionar. "Parecía que estuviera en otra película", prosigue. "Nick estuvo de acuerdo, así que volvió y, en una increíble sesión de cuatro horas, volvió a empezar desde el principio y rehízo todo el guión".
Goldberg dice que elegir a Nick Kroll no sólo fue algo inspirado, sino que es una inspiración que ya se había producido antes. "Antes de esta película, Nick ya contaba con dos créditos en IMDB de un personaje llamado ‘Ducha’", explica Goldberg. "Nosotros le proporcionamos el tercero".
Craig Robinson interpreta a Gachas, y aporta a su personaje lo que Shaffir describe como la"actitud tranquila y enrollada" del actor.
Por último, James Franco interpreta a un personaje humano, Drogata. "Creo que la gente va a ver la película y no se va a dar cuenta de que es él, de igual modo que no reconocerán a Edward Norton como Bagel", opina Hunter. "Franco fue el primer actor en grabar su papel y fue una auténtica locura. Salió muy bien".
Mientras los actores grababan sus líneas de diálogo, las videocámaras estaban en marcha."Se hizo específicamente para los animadores, para que pudieran intentar reflejar al máximo posible la interpretación del actor", explica Tiernan. "Nos fijamos en sus rostros, se puede ver cómo les brillan los ojos cuando están haciendo algo divertido; les salen toda clase de expresiones y tics faciales, y los animadores toman todo eso e intentan incorporarlo a la actuación de los personajes. Seth incluso nos preguntó una vez si habíamos estudiado grabaciones suyas para obtener expresiones para Frank, porque, dijo: ‘Eso me recuerda a mí’".
Una película con buen gusto
Al crear la comedia para adultos, definir lo que Vernon califica de "la línea del buen gusto" supuso una discusión constante. "La línea no dejaba de moverse de un lado a otro", comenta. "Unas veces la cruzábamos y otras no llegábamos suficientemente lejos".
Pero, señala Tiernan, forzar los límites de lo posible resultó algo natural porque, para un animador, eso es justo lo que hacen. "En la animación, siempre quieres llegar más lejos, ya sea con la historia, o con la ejecución de la animación, porque siempre es más fácil dar un paso atrás", explica Tiernan. "Teníamos eso muy arraigado desde el primer día en que empezamos en el mundo de la animación. No te censures, porque ya se encargarán los demás de hacerlo por ti".
Aun así, como directores, tenían que ser responsables de asegurarse de que, a fin de cuentas, la película ofreciera una experiencia cinematográfica amena. "Tuvimos que tener mucho cuidado para que la película no se limitara simplemente a escandalizar", sostiene Tiernan. "Esa no fue nunca la intención, se suponía que debía tener personalidad, sentimiento y ofrecer una gran historia. Podíamos ir tan lejos como quisiéramos, pero siempre teníamos que preguntarnos: ‘Vale, ¿esto tiene gracia? ¿Qué aporta a la historia?’".
Uno de los aspectos que el equipo responsable del proyecto decidió llevar al límite fue el diseño del personaje de Brenda. "Todos estallaron a carcajadas la primera vez que vieron el diseño", comenta Vernon. "Nuestro diseñador de personajes, Craig Kellman, plantó esa boca vertical ahí, no es de los que se corte. Se lo llevé junto con otros diseños más a Seth y Evan y se pusieron a ojearlos, ‘mola, mola, mola’… y entonces se pusieron a reír y a exclamar ‘Oh, Dios mío’. Al final, hubo un momento en que nos preguntamos, ¿de verdad deberíamos hacerlo? ¿Podrá la gente conectar con ella si tiene una boca vertical? Y Megan Ellison dijo: ‘Si no le dejan la boca vertical, no pienso hacer la película’".
Por divertida que sea la película, los directores también quisieron dotarla de una gran escala."Queríamos hacer la película lo más grandiosa, cinematográfica y gloriosa posible", afirma Vernon. "No sólo ofrece un contraste maravilloso con el tema que trata, sino que queríamos que la gente sintiera que tenía que verla en el cine".
Con esa idea presente, los directores se inspiraron no solo en otras cintas de animación, sino en películas épicas de acción real anteriores. "Nuestra idea en todo momento era hacer como si fuera una película de acción real que simplemente resulta que está animada", aporta Tiernan. "Más allá de Conrad y yo, todos los demás implicados en sacar adelante el proyecto no tenían experiencia alguna en animación. Abordaron el proyecto desde la perspectiva del cine de acción real, lo que resultó muy refrescante para nosotros".
Vernon continúa explicando, en cuanto a las fuentes de inspiración del equipo creativo: "Para el pasillo mexicano, fuimos directamente a Sergio Leone, ‘El bueno, el feo y el malo’, ‘La muerte tenía un precio’, ‘Hasta que llegó su hora’... nos fijamos en cómo esas películas resultaban grandiosas y cinematográficas. Nos fijamos en las viejas películas de kung fu de Jackie Chan, porque están todas maravillosamente rodadas. Y, por supuesto, ‘Salvar al soldado Ryan’ era algo evidente. Todo lo que usamos, intentamos tomarlo como referencia desde un punto de vista de escala cinematográfica, de visión grandiosa".
Uno de los retos que planteaba LA FIESTA DE LAS SALCHICHAS fue que los animadores pudieran ofrecer una película de animación por ordenador con un aspecto, una calidad y un aire comparable al de cualquier otra película de animación del mercado, pero que al mismo tiempo fuera factible dentro de la realidad económica de una comedia para adultos. "En la mayor parte de las películas de animación, si algo no funciona, pueden volver atrás y volver a animarlo, pueden cambiarlo sin más", explica Goldberg. "En un primer momento, el plan era que no podíamos hacer eso, teníamos que dejarlo todo muy bien atado en el guion. Y aun así no conseguimos cumplirlo del todo".
Así que los animadores encontraron formas para que funcionara. "Todos los personajes son tarros y cajas, no hay mucho pelo, que lleva mucho tiempo", señala Vernon. "No hay que hacer mucho para animar estas cosas de forma creíble. Hay cientos de productos en las estanterías, así que nos aseguramos de que nuestros modelos se pudieran ampliar de escala, y que pudiéramos usar tal vez ocho modelos distintos para 500 personajes diferentes. Esa clase de decisiones nos dieron algo de margen para poder volver atrás y realizar retoques. Y nadie lo diría, tenemos amigos que son animadores y, al ver la película, nos preguntan: ‘¿Cómo diablos conseguís semejante calidad con el presupuesto que tenéis?’. Y la respuesta es el estudio de Greg, Nitrogen".
Otra forma más que tiene LA FIESTA DE LAS SALCHICHAS de rendir homenaje a las cintas de animación que la precedieron fue fichar a Alan Menken para que cocompusiera (junto a Christopher Lennertz) la banda sonora del filme y escribiera la música de una canción. Menken, que ha ganado ocho Óscar y ha estado nominado 19 veces, ha aportado música memorable a clásicos familiares como "La sirenita", "La bella y la bestia", "Aladdin","Hércules", "Encantada" y "Enredados".
¿Y ahora le llega el turno a LA FIESTA DE LAS SALCHICHAS? Tal vez no sea una elección tan disparatada como pudiera parecer; al fin y al cabo, Menken (junto con su difunto socio, Howard Ashman) también fue responsable del clásico subversivo "La pequeña tienda de los horrores".
"La verdad es que nos ofreció varias canciones distintas", recuerda Vernon. "Fue increíble, la cantidad de canciones que nos dio, todas ellas estupendas, por cierto. Y entonces, estábamos escuchando una de ellas y dijimos: ‘Esta es’. Por una palabra: añoranza. Parecía como si estuvieran cantando sobre algo que añoraban, se puede sentir que, en lo más profundo de su ser, están entusiasmados de poder salir algún día por esas puertas".
La letra para la melodía de Menken fue escrita por el nominado al premio Tony y al Óscar Glenn Slater, junto con Rogen, Goldberg, Shaffir y Hunter.
"La canción es una especie de oración que perfila su sistema de creencias", explica Rogen."La comida canta esta canción cada mañana para reafirmar la idea de que es bueno que los elijan. Luego resulta que el aguardiente y los demás productos no perecederos compusieron la canción, porque se sentían sumamente desanimados por la verdad y no creían poder hacer nada para cambiarla".
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